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En los tiempos que corren, ahorrar agua en el hogar nos preocupa a todos, pero ¿qué me dices ahorrar agua en tu jardín o huerto? ¿Gastas demasiada agua regando, limpiando y manteniendo en buen estado tus flores, árboles, setos, legumbres y hortalizas?

Si la respuesta es “sí”, has llegado al sitio web adecuado: el blog sobre jardinería que te ayuda a disfrutar más y mejor de tu hobby favorito.

El artículo de hoy está dedicado especialmente a todos aquellos jardineros y horticultores que quieren conocer algunos trucos para ahorrar agua sin que afecte negativamente a sus cultivos. Porque sí, en Internet hay muchos trucos para ahorrar agua en tu huerto urbano, en tu parcela o en tu jardín, pero no todos tienen en cuenta las necesidades reales que tienen esos seres vivos que crecen en nuestras tierras, las plantas.

Así que vamos a ello, vamos a ver 7 trucos para ahorrar agua en tu jardín sin poner en peligro tus plantas y cultivos.

 

3 trucos para ahorrar agua: el desperdicio

¿Sabes cuál es el primer truco para ahorrar agua?: saber cómo se desperdicia este valioso elemento sin que nos demos cuenta.

Casi todos sabemos cómo se desperdicia el agua en casa o en el colegio: dejando abierto el grifo mientras nos lavamos los dientes o fregamos los platos, tomando duchas larguísimas, no instalando limitadores de descarga de agua en el inodoro… Pero no todo el mundo sabe cómo se desperdicia el agua en el huerto o en el jardín, así que, toma nota:

1. No revisando la colocación de las mangueras del riego por goteo.

Seguro que más de una vez y más de dos has visto en la calle o en el parque cómo las mangueras de goteo que deberían regar un árbol, un seto o una zona concreta de césped están desplazadas y riegan alegremente los adoquines de la acera, los coches aparcados cerca o, incluso, las piernas del paseante despistado.

Los sistemas de riego por goteo de los árboles y de las zonas verdes públicas y privadas se pueden desplazar por multitud de causas: el viento, la lluvia, un perro o un gato que escarba cerca… Así, el primer truco para ahorrar agua es tan sencillo como necesario: revisar periódicamente la colocación de los dispositivos de riego y volver a colocar los que se hayan desplazado.

 

2. Regando todas las zonas y plantas por igual.

Uno de los errores más frecuentes que cometen los novatos jardineros y que suponen un gasto tremendo de agua y de dinero es colocar el sistema de riego automático más barato, abrir el grifo y dejar que el agua corra alegremente por su jardín.

Conocer las necesidades reales de agua de tus plantas, hortalizas, césped, árboles y flores es fundamental para ahorrar agua en tu huerto o en tu jardín. Si no lo sabes, pregunta a un experto en agricultura y jardinería: un vecino, un jardinero profesional, el vendedor del vivero… En cuanto sepas ese dato y ajustes el riego a la especie, te aseguro que ahorrarás agua y, por supuesto, bastante dinero.

 

3. No aireando y tratando el terreno

Otra de las formas clásicas de desperdiciar agua en tu huerto o jardín es no mantener bien hidratado y suelto el suelo de cultivo. La tierra seca, pobre y dura no hace otra cosa que impermeabilizar el terreno e impedir que el agua nutra las raíces de las plantas, los setos y los árboles. El agua que eches en este terreno duro resbalará y se quedará en el primer hoyo que encuentre, dejando con sed a las especies que lo necesitan a tu bolsillo vacío a base de regar y regar sin ver resultados. ¿La solución?: Una buena e indispensable motoazada.

 

 

Otros 4 trucos para ahorrar agua en tu huerto o jardín

Además de revisar el riego por goteo, conocer las necesidades de agua de cada especie vegetal que crece en tu jardín y de mantener el terreno suelto y bien cuidado, hay más ideas para ahorrar agua que puedes poner en práctica con una inversión mínima. Por ejemplo las siguientes:

4. El césped.

Tener un césped bonito y bien cuidado requiere un consumo medio de agua de riego. Si tienes mucha extensión de terreno, economizarás agua de riego sustituyendo parte de la zona de césped por setos o zonas empedradas. También puedes replantar especies de césped que necesiten menos agua para vivir, apurar menos con el cortacésped durante el verano para que retenga mejor la humedad, etc.

 

5. El horario para regar en las estaciones cálidas.

La primavera y el verano son las estaciones del año con mayor demanda de agua de riego. Es lógico ya que el calor aprieta, el agua se evapora y las plantas tienen más sed.

Como sabes, en líneas generales, las mejores horas para regar tu jardín en primavera y en verano son las primeras de la mañana o las últimas de la tarde noche. El motivo es bastante simple: si riegas tu jardín a pleno sol, el agua se evaporará antes y la eficacia del riego disminuirá.

 

6. La distribución del jardín.

Como te comentábamos en párrafos anteriores, el consumo particular de agua de riego se suele disparar porque los jardineros aficionados no tienen en cuenta las necesidades de agua de las diferentes especies que plantan en su terreno. Quizás te lleve algo de tiempo replantar y redistribuir las especies en función del agua que necesite cada una de ellas, pero a medio y largo plazo es una de las medidas más eficaces y recomendables de ahorro de agua en tu jardín.

 

 

7. El agua de lluvia.

Si no tienes un pozo artesiano, seguramente tendrás que regar con el agua de traída (la del grifo). Una medida excelente para ahorrar un poco de agua es colocar un depósito en tu parcela para recoger el agua de lluvia. Después sólo tendrás que usar una bomba y trasvasar el agua depositada para regar tu parcela con esa agua de lluvia que, de otra forma, se habría desaprovechado.

Hay muchos modelos de bomba de agua que puedes comprar por un precio muy ajustado. Las electrobombas o bombas eléctricas son las más económicas, pero si tienes un terreno amplio también puedes adquirir fiables y duraderas motobombas de gasolina a presión para riego, motobombas de gasolina de caudal, etc.


Toda la info es de: https://maquinariadejardineria.net/blog/7-trucos-ahorrar-agua-jardin/