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El agua es un recurso tan vital como el aire que respiramos. Sin embargo, aunque nuestro cuerpo está compuesto por más de un 60% de ella, solo un 3% del agua de las reservas del mundo es dulce. De ese porcentaje, cerca del 70% se encuentra congelada y 30% bajo tierra. 

Siendo ya un recurso escaso, la contaminación y las dificultades en el acceso lo convierten en un verdadero tesoro para comunidades enteras. 

Según la Organización Panamericana de la Salud, en América Latina y el Caribe son 40 millones de personas las que no tienen acceso a fuentes de agua mejoradas. Y esta difícil realidad necesita de ojos que la vean y manos que brinden soluciones urgentes y reales. 

Soñando con cambiar esta situación, un joven médico de 27 años llamado Nicolás Wertheimer decidió hacer algo al respecto y, junto con el conductor, actor y embajador argentino de UNICEF, Julián Weich, impulsaron el “Proyecto Agua Segura”, una compañía social argentina que busca prevenir las enfermedades en las comunidades vulnerables, garantizando a las personas su derecho a acceder al agua segura. 

Mediante la educación y el uso de tecnologías innovadoras, ellos acercan soluciones reales y efectivas de prevención sanitaria a las comunidades. La información sobre los cuidados y la importancia de beber agua segura es fundamental para ellas. Además se les brinda una posibilidad concreta al alcance de sus manos mediante los filtros LifeStraw. 

Estos filtros son de probada efectividad y han sido utilizados en todos los continentes a través de las ONG más importantes del mundo. Gracias a su innovadora tecnología, permiten que el agua contaminada o extremadamente sucia pueda ser recuperada y saludable para su consumo. 

Además, existen distintos modelos de acuerdo a cada necesidad: LifeStraw® Family 1.0, para uso familiar en caso de hogares sin acceso al agua potable y para situaciones de emergencia ambiental; LifeStraw® Family 2.0, que cuenta con un recipiente en donde se conserva el agua limpia y un dispenser para facilitar su uso en los hogares; y LifeStraw® Community, un purificador de agua de alto volumen que brinda hasta 3 años de agua segura para 100 chicos de escuelas y previene las enfermedades transmitidas por el agua.

De todas las metodologías aplicadas al tratamiento de agua, los filtros LifeStraw se destacaron por ser los únicos que cumplen con los más altos estándares en protección sanitaria según la OMS (febrero 2016).

Este tipo de soluciones no se vuelve una opción, sino una verdadera necesidad. Cada año alrededor de 1.500 millones de personas son afectadas por enfermedades transmitidas por el agua y cada 90 segundos muere un niño por esta causa, según un informe de Joint Monitoring Programme (OMS y UNICEF, 2015). 

Por eso, LifeStraw se convierte, para comunidades enteras del mundo, en la posibilidad real de conservar la salud y salvar sus vidas. 

Hoy, el Proyecto ha llegado a más de 300 familias argentinas, a 100 escuelas rurales y a más de 40 comunidades; además de a unos 50 centros de evacuación, permitiéndole a 20 mil personas el acceso al agua potable. Pero los creadores del Proyecto quieren ir más allá y alcanzar a 20 mil escuelas rurales. Porque, como señala Nicolás: “En esas zonas está el corazón del problema, hay mucha necesidad”.

En latinoamérica ya son muchos lo que cuentan con agua segura gracias a estos filtros. Tú también  puedes involucrarte y trabajar para hacer de éste, un mundo mejor para todos, donde no haya nadie que se quede por fuera del derecho al agua segura.